Los niños necesitan alimentos nutritivos para aprender, crecer y desarrollarse, incluso cuando no hay escuela. Con los Programas de Comidas de Verano, los niños y adolescentes de 18 años o menos, y los estudiantes con discapacidades inscritos hasta los 21 años, pueden seguir comiendo sano durante todo el verano sin costo alguno en cualquier centro participante donde se ofrezcan comidas.
No se requiere identificación; los niños simplemente tienen que presentarse. A partir del 1 de junio, visite un centro donde se ofrezcan comidas cerca suyo.